La importancia de la expansión de la tecnología HB4 en África
La Organización de las Naciones Unidas indica que 250 millones de personas de África se ven afectadas por el estrés hídrico elevado. La llegada de la tecnología HB4 a la región ofrece una solución a esta problemática que se agrava por la crisis climática.
El crecimiento de la tecnología HB4 en África es fundamental por varios motivos. En primer lugar, brinda una solución a los problemas de sequías y a la necesidad de garantizar el abastecimiento de alimentos en una población en constante aumento. Al mismo tiempo, permite a Bioceres expandirse por nuevos horizontes comerciales.
La tecnología HB4 llega a África
En 2022, y con apenas unas semanas de diferencia, Bioceres recibió la aprobación del trigo HB4 por parte de dos de los países más importantes de África: Nigeria y Sudáfrica.
Nigeria fue el primero en hacerlo, y Sudáfrica se sumó a la lista casi de manera inmediata. La noticia se dio en un contexto favorable para el desarrollo de Bioceres, ya que fueron varios los países de todo el mundo que dieron su visto bueno a los eventos transgénicos.
Meses más tarde, Sudáfrica también aprobó la soja HB4. Pero el caso del trigo es más resonante ya que se trata del segundo cultivo más importante del país, por detrás del maíz.
Las posibilidades comerciales para Bioceres
Para la empresa con sede en Rosario, Santa Fe, el hecho significó un crecimiento concreto: el de llegar con la tecnología transgénica a dos mercados nuevos, ambos en el mismo continente.
También supuso una expansión potencial: la de llegar a otros mercados a partir del ingreso en África. Y vuelve a destacarse la aprobación de Sudáfrica debido a los vínculos de importación y exportación que tiene este país con otros del continente.
Sudáfrica, por ejemplo, exporta trigo y productos elaborados con este cultivo a los siguientes países: Zimbabue, Botsuana, Lesoto, Zambia y Namibia. Además de las posibilidades comerciales, esto implica que los beneficios de la tecnología HB4 pueden llegar a más países del mundo.
Una alternativa de cara a la crisis climática
La tecnología HB4 surgió a partir de una investigación realizada por Raquel Chan y su equipo de científicos. El desarrollo sobresale por presentar cultivos de trigo y soja que presentan una mayor tolerancia a la escasez de agua y una mayor resistencia a los altos niveles de salinidad de los suelos.
En Argentina se realizaron numerosos ensayos para comprobar las virtudes del evento. Una de las conclusiones más destacadas es que, en terrenos con estrés hídrico, los cultivos HB4 presentan un rendimiento considerablemente mayor que los convencionales.
El trigo y la soja transgénica son un seguro para los productores agrícolas ya que optimizan el rendimiento de las campañas. También son una alternativa para hacer frente a la crisis climática que genera sequías más profundas y duraderas.
El estrés hídrico en África
África es uno de los continentes más afectados por la escasez de agua. La Organización de las Naciones Unidas (ONU) indica al respecto que unas 250 millones de personas de la región son alcanzadas por el estrés hídrico elevado.
Son cifras actuales que se encuentran en crecimiento constante debido a la crisis climática. La falta de agua y el aumento de las temperaturas reducen la eficacia de los cultivos convencionales. Y las producciones se vuelven menores y generan desabastecimiento de alimentos.
Esta última problemática es otra de las más graves que padece la humanidad en el presente. Y exige medidas urgentes ya que se acentuará con el paso del tiempo.
La clave se encuentra en que el total de la población mundial también aumenta de forma constante. Según la ONU, hacia fines del 2022 el planeta Tierra era habitado por unos 8000 millones de personas. La misma institución estima que, para el año 2050, la cantidad será de 9700 millones. Y que, para el 2100, el total llegará a los 10400 millones.
La llegada de la tecnología HB4 a África es importante en lo comercial para Bioceres, pero lo es aún más para la población mundial. En un contexto de aumentos de sequías y de habitantes a escala global, el evento transgénico asegura una producción más eficiente y, por lo tanto, el abastecimiento de productos alimenticios.