Uganda y la banana transgénica que podría salvar la vida de miles de niños
La banana es uno de los alimentos principales de Uganda, país en el que se consume al año un promedio de 400 kilos por persona. Mejorar la calidad nutritiva del cultivo es clave para hacer frente al grave problema de desnutrición que afecta a este y otros territorios cercanos.
Científicos de Uganda desarrollaron una banana genéticamente modificada que presenta una mayor cantidad de betacaroteno, pigmento que se convierte en vitamina A al ser ingerido. La novedad transgénica se presenta como una solución para un grave problema que afecta a muchos países del mundo: la muerte de miles de niños por insuficiencia de este nutriente esencial.
La biotecnología moderna en Uganda
En Uganda tuvo lugar uno de los desarrollos de cultivos transgénicos más resonantes de los últimos tiempos: el de la Súper Banana.
Se trata de una banana genéticamente modificada que presenta una mayor cantidad de betacaroteno. También conocida como provitamina A, es una sustancia que se convierte en vitamina A una vez que ingresa en el cuerpo humano y es procesada por el hígado.
No es la primera vez que los científicos de Uganda aplican las técnicas de la biotecnología moderna en plantas de banano. Sin embargo, antes lo habían hecho con objetivos tales como el mejoramiento de la resistencia a plagas y a sequías.
Un problema grave
El desarrollo de la Súper Banana nació a partir de una necesidad importante de Uganda: la de hacer frente a la desnutrición infantil y a la deficiencia de vitamina A.
Es un grave problema de salud que también se manifiesta en otros países del África subsahariana y del sudeste asiático. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), 190 millones de niños en edad preescolar padecen en la actualidad deficiencia de vitamina A.
En Uganda son miles los casos de muertes anuales. A lo largo de años, se probaron distintas alternativas para reducir la problemática, aunque sin éxito. Fue así como un equipo de científicos se propuso desarrollar una variedad de banana enriquecida nutricionalmente, partiendo de la base del lugar protagónico que ocupa este cultivo en la cultura gastronómica de los ugandeses.
Las claves del desarrollo
El cultivo transgénico fue creado en los Laboratorios Nacionales de Investigación Agrícola (NARL) de Uganda gracias a un proyecto encabezado por científicos como Wilberforce Tushemereirwe y que se extendió a lo largo de unos 20 años.
También fue fundamental la participación de James Dale, un experto en banana de la Universidad Tecnológica de Queensland (Australia), y de la Fundación Bill y Melinda Gates, que invirtió un total de 11 millones de dólares en el proyecto.
La clave del logro se encuentra en una variedad de banana que crece en la isla de Nueva Guinea: la Asupina, que presenta hasta 30 veces la cantidad de provitamina A que contienen los cultivos de Uganda y otros países cercanos.
Mientras los científicos ugandeses se preparaban para trabajar con técnicas de ingeniería genética, James Dale logró identificar el gen del fitoeno sintasa del banano de Nueva Guinea responsable de producir la provitamina A.
Luego, este gen fue insertado en una de las variedades de Uganda y los resultados fueron satisfactorios: se obtuvo un cultivo mejorado en una vitamina clave para combatir la desnutrición en el país.
Como el betacaroteno también es un pigmento, la Súper Banana tiene un rasgo distintivo que la diferencia de otras variedades: su pulpa presenta un tono naranja.
El desafío continúa
La variedad transgénica de banana enriquecida en provitamina A ya se encuentra preparada para su cultivo a gran escala, consumo y comercialización. Sin embargo, aún no cuenta con la aprobación gubernamental correspondiente.
La legislación sobre bioseguridad fue aprobada por el parlamento ugandés en 2017. En 2021, a su vez, se dio el visto bueno a una versión revisada. Pero la misma aún continúa en estado de revisión por orden del presidente Yoweri Museveni.
La habilitación de la biotecnología aplicada al mejoramiento de cultivos agrícolas se espera con ansias por los beneficios que la Súper Banana tiene para ofrecer a los habitantes de Uganda. Pero este caso no es el único, ya que el país cuenta con otros desarrollos transgénicos (yuca, papa) que aguardan por su aprobación.