El trigo HB4 y la superficie de territorio ocupada durante la campaña 2023/24
Paraná HB4 fue la variedad de trigo transgénico que más se cultivó durante la última campaña. Este evento de Bioceres ocupó un total de 19.557 hectáreas en el territorio argentino.
El trigo HB4 ocupó un 0,6% del total del territorio sembrado con el cultivo durante la campaña 2023/24. Las variedades del evento transgénico que se cultivaron son cinco: Bermejo HB4, Iruya HB4, Paraná HB4, Pilcomayo HB4 y Traful HB4. El informe compartido también revela que muchos productores se abstuvieron de la siembra debido a las restricciones hídricas.
Las hectáreas que ocupó el Trigo HB4
La información la dio a conocer el Instituto Nacional de Semillas (Senase) en base a todas las declaraciones que brindaron los productores agrícolas al Sistema de Información Simplificado Agrícola (SISA).
Los datos corresponden a la última campaña de trigo: la de 2023/24. Indican, entre otras cosas, la superficie de territorio sembrada con el cultivo, la cantidad de productores agrícolas que participaron y las variedades sembradas.
En lo que se refiere a la tecnología HB4, el informe revela que las variedades de trigo transgénico ocuparon un área total de 32.270 hectáreas, lo que representa un 0,6% de la superficie total nacional.
La de Paraná HB4 fue la variedad más sembrada: ocupó 19.557 hectáreas. Pero no fue la única: el evento transgénico de Bioceres también se hizo presente con Bermejo HB4, Iruya HB4, Pilcomayo HB4 y Traful HB4.
Más sobre la campaña 2023/24
La superficie sembrada durante la última campaña fue de casi 5 millones de hectáreas (4.999.386). Uno de los datos más llamativos es que el 49,1% del total fue cubierto por los primeros diez cultivares de un total de 403.
Baguette 620, Pehuen, Catalpa, Ceibo, Algarrobo y Ñandubay son algunas de las variedades más sembradas.
En cuanto al trigo candeal, el informe de Senase revela que se sembraron 124.013 hectáreas. Y que la mayor parte de esta superficie corresponde a los cultivares Perla, Cariló, Odisseo y Zafiro, entre otros tantos.
Un dato que preocupa
El documento compartido permite apreciar que la mayor parte de la superficie nacional fue concentrada por unas pocas empresas. Se observa que un 53,4% del total fue sembrado por un 10% de las compañías que participaron de la campaña. En línea con esto, el 30% de las empresas abarcaron el 78,4% del área.
De esto se deduce que más de 23.000 pequeños productores formaron parte de la campaña con una siembra de superficie reducida.
Las empresas que sembraron trigo durante la temporada 2023/24 fueron en total 33.422. La cantidad representa un 10,8% menos en comparación a lo registrado durante 2021/22.
La superficie de siembra declarada también disminuyó entre ambos períodos: lo hizo en un 14,60% (fue de 5.854.086 en 2021/22).
El de las restricciones hídricas es uno de los principales motivos por los que las empresas no participan de las campañas. Ya sea en el presente o proyectada a futuro, la escasez de agua sigue siendo una variable de riesgo para los productores agrícolas.
Tecnología HB4: Una alternativa a tener en cuenta
La presencia de la tecnología HB4 en la campaña 2023/24 sobresale entonces por varios motivos.
El primero de todos corresponde a la expansión y consolidación que vienen demostrando las variedades transgénicas en los últimos años. De la mano del programa Generación HB4, son cada vez más los productores que apuestan por el desarrollo de Raquel Chan, Bioceres y colaboradores. Y también es mayor la cantidad de semillas y superficie abarcada.
Por otro lado, el trigo y la soja transgénicas se presentan para hacer frente al mismo inconveniente que genera que sean menos los productores que participan de las campañas.
La tecnología HB4 ofrece al mundo cultivos tolerantes al estrés hídrico en un contexto de crisis climática, que hace que las sequías sean más intensas y duraderas.
Los eventos transgénicos también brindan respuestas positivas a los altos niveles de salinidad de los suelos. En resumen, mejoran los rendimientos y optimizan las producciones, por lo que constituyen una herramienta fundamental para los productores que buscan mayor seguridad en la siembra.
En el marco de una población mundial en constante aumento, la tecnología también garantiza el abastecimiento de alimentos. Esto convierte al evento en un fenómeno único tanto a nivel nacional como internacional.