La escasez de agua afecta una vez más la campaña de trigo en Argentina
Eventos transgénicos como la tecnología HB4 representan una alternativa para hacer frente a las condiciones adversas de la crisis climática. Las variedades de trigo y soja desarrolladas por Raquel Chan y Bioceres se caracterizan por la resistencia al estrés hídrico y a los altos niveles de salinidad de los suelos.
La actual campaña de trigo en Argentina se enfrenta una vez más a la grave problemática de la escasez de agua. Sectores de la zona núcleo presentan cultivos que se ven desfavorecidos por la falta de agua. Al mismo tiempo, los productores agrícolas deben cambiar la estrategia debido a un desplazamiento inesperado del fenómeno La Niña.
Informe de la zona núcleo
La Bolsa de Comercio de Rosario presentó hace unas semanas un nuevo informe en el que da cuentas de la actualidad de la campaña de trigo en Argentina.
La cuestión principal que se revela es que el cultivo se enfrenta una vez más a una problemática grave que se vive tanto en Argentina como en muchos países del mundo: el estrés hídrico.
El informe se centra en la actividad agrícola que tiene lugar en la zona núcleo, región comprendida por localidades de las provincias de Santa Fe, Córdoba y Buenos Aires. Y hace referencia a lo sucedido hasta las primeras semanas de agosto.
Condiciones adversas
La Bolsa de Comercio de Rosario reveló que el mes de julio fue particularmente duro para los cultivos de trigo: las condiciones climáticas fueron adversas y estuvieron marcadas por las fuertes heladas sucesivas y la ausencia de lluvias.
La caída de agua durante la primera semana de agosto revirtió en parte la situación. Sin embargo, las lloviznas que continuaron en los días siguientes fueron menores a lo esperado, lo que volvió a poner en el centro de la escena a la escasez de agua.
El informe explica que la situación de los lotes para el período en cuestión es regular. Indica que el 59% se mantiene en buen estado, el 30% en muy buen estado y habla de un 3% en condiciones excelentes. El porcentaje restante, en cambio, responde a lotes de regulares a malos.
Casos particulares
La Bolsa también menciona que el trigo de lotes en ambientes regulares se encuentra estancado, a una importante distancia de cerrar el entresurco.
Al mismo tiempo, menciona algunos casos particulares. Uno de ellos es el de la localidad cordobesa de Viamonte. Según la Bolsa, los productores de la región ya renunciaron a la idea de generar una gran campaña, aunque esperan una caída importante de agua durante septiembre para revertir la situación.
Caso similar es el del noreste de Buenos Aires, comprendido por ciudades como Baradero, San Pedro y Ramallo. En cambio, zonas santafesinas como Los Quirquinchos y Carlos Pellegrini evidencian una recuperación de las heladas padecidas.
Cambio de estrategia
La campaña actual de trigo aún no termina y se espera que su rendimiento se vea afectado por otro fenómeno climatológico: el de La Niña.
Lo adverso de la situación no se encuentra en el fenómeno en sí, sino en que el mismo no se presentará de la manera en que se esperaba. La Bolsa de Comercio de Rosario informó que estaba previsto que La Niña hiciera su aparición durante el mes de septiembre, pero que la misma se retrasará al menos un mes.
Agrega que se esperaba que el mes de mayor afección fuese diciembre, pero que ahora todo parece indicar que la intensidad de La Niña se manifestará durante enero.
El informe de la asociación civil resume la situación explicando que el evento La Niña no será tan grave durante septiembre, octubre y noviembre. Por el contrario, lo será hacia fines de este año y comienzos de 2025.
Para los productores agrícolas supone un desafío urgente: el de adaptarse a la situación y modificar sus estrategias para la campaña actual. La necesidad aplica tanto para el trigo como para otros cultivos sembrados.
La tecnología HB4 como alternativa
Las condiciones climáticas adversas no son circunstanciales: son producto de un contexto global marcado por la crisis climática y el aumento de las temperaturas, entre otras cosas.
La biotecnología agrícola aplicada al mejoramiento de cultivos ofrece alternativas para hacer frente a este contexto. Y la tecnología HB4 es una de ellas.
Con variedades transgénicas de trigo y soja, el evento desarrollado por Raquel Chan y Bioceres se caracteriza por la resistencia al estrés hídrico y a los altos niveles de salinidad de los suelos.
Funciona como una garantía de rendimiento para los productores agrícolas y también es clave para asegurar el abastecimiento de alimentos para la población.